¿Te has levantado por la mañana con una sensación de cansancio y presión en los dientes o la mandíbula? ¿Sufres de dolores de cabeza o dolor muscular al masticar después de despertarte? Son señales de bruxismo, una disfunción del sistema masticatorio que consiste en apretar o rechinar los dientes de forma inconsciente.
Existen varios tratamientos, pero uno que se está generalizando son las inyecciones de Bótox para el bruxismo. ¿Qué es, en qué consiste y cuál es el objetivo del tratamiento definitivo para el bruxismo?
Eso lo descubriremos en la siguiente publicación. Si quieres saber si este enfoque es para ti, lee hasta el final.
Todo lo que debes saber sobre el bruxismo
El bruxismo es una disfunción del sistema masticatorio que consiste en rechinar o apretar los dientes de manera involuntaria. Se manifiesta en forma de chasquidos o roces rápidos en la articulación de la mandíbula.
El bruxismo puede aparecer tanto en la mañana (bruxismo diurno) o durante la noche (bruxismo nocturno), siendo este último el más común. De ahí esas sensaciones, vibraciones y dolores focalizados justo al levantarse.
Los afectados notan la actividad masticatoria involuntaria del bruxismo al inicio, hasta que los síntomas, como el cansancio, la tensión en la mandíbula o los dolores en la boca, se hacen evidentes.
Existen diferentes síntomas relacionados con el bruxismo. No siempre son claros y fáciles de identificar a la primera. Los más comunes son dolor recurrente en los dientes y la mandíbula acompañado de tensiones en la cara, los hombros y el cuello, dolores de cabeza, mareos, zumbidos en el oído y dificultades para masticar debido a desviaciones de mandíbula en una etapa avanzada de bruxismo.
En cuanto a las causas, no están claras. El más aceptado de todo es debido a situaciones de gran tensión física y mental. O lo que es lo mismo a estrés. Puede ser por exigencias en el trabajo, problemas de salud o nervios por competiciones deportivas.
Pero esas no son las únicas, hay más, como:
- Disfunciones en la articulación de la mandíbula
- Trastornos del sueño
- Ronquidos
- Medicamentos con dopaminas
- Reflujos
- Adicción al alcohol, la cafeína y el cigarrillo
Tratamiento para el bruxismo con neurotoxina
Aunque existen diversos tratamientos para el bruxismo, como usar férulas de mordidas adaptadas a la dentadura para bloquear el rechinamiento de los dientes durante las noches; o realizar ejercicios para disminuir la cantidad de veces que se rechinan los dientes, uno de los enfoques que ha ganado protagonismo en los últimos años para casos graves de bruxismo es la neurotoxina.
Consiste en inyectar toxina botulínica, que es un bloqueador de nervios muscular, en el músculo masetero (encargado de la masticación) para relajar el área y debilitar parcialmente la mandíbula.
Esto consigue que la dentadura no rechine de manera involuntaria o siga contrayéndose al punto de afectar la posición o la ubicación de la mandíbula.
Es un procedimiento sencillo. No tiene efectos adversos. La única convalecencia conocida es un poco de dolor durante la inyección. Pero, en general, la toxina es segura y desaparece de forma natural al cabo de los días.
Los resultados a largo plazo son favorables. Previene el desgaste del esmalte de los dientes, reduce la sensación de dolor en la cabeza y la mandíbula, previene daños permanentes en el músculo masticatorio externo y calma otros síntomas asociados al bruxismo, como el estrés o la ansiedad.